Este amor desconoce lo imposible
y acogen nuestras almas las corrientes
que nos guían de la mano a lo increíble,
logrando del amor roces ardientes.
-Yo te busco en ese sueño imbatible
de islotes emergidos y candentes.
-Yo te espero en las olas, invisible
renaciendo en pasiones y en rompientes.
Somos dos que de un sueño hacen hoguera,
uno y otro albergando fantasías,
embriagados entre olas y reflujos.
Es leyenda, un amor hecho quimera
la sirena, el marino y malvasías
ya por siempre, hechizados con embrujos.
Ángeles Sánchez Gandarillas ©
7-III-2012
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