Hoy me dices que no cuentas
que has pasado un nuevo ciento,
que te enredas y revientas
entre hadas y portentos.
Me decías que sonetos
no contabas y tenías...
¡Contador, pierdes la cuenta!...
de un millón y de miriadas
de otra era,”cito cuento”,
infinitas y compuestas,
quizá fuera quinto, sexto
o tal vez el ciento ochenta.
No te pierdas en la cuenta,
cuenta, cuenta que hay descuento,
abre alas, vuela al viento,
lo correcto es cerrar cuentas.
Ahora suma si recuentas,
lo que cuentas ya no es cuento,
ni distancias ni doscientas,
es un ciclo que es perfecto.
No me cuentes que tu cuentas,
¡no es posible, más es resto!,
ser contable me aparentas
Y yo digo mientras cuento...
que quien cuenta no es poeta
porque escribe y no da cuentas.
Ángeles Sánchez Gandarillas ©
7-III-2012
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