viernes, 11 de noviembre de 2011

TIEMPO AL TIEMPO


¡Sí, ese es el amigo de verdad!,
el que dicta nuestras vidas,
o las almas,
o las noches
y es en ellas donde suele sobrar tiempo,
recogido en almohadas
que no sienten,
que no abrazan,
ni sosiegan.


Al principio sentirían esos sueños
sin medidas en el tiempo;
ilusiones que duraron infinito,
que murieron en cenizas de pesares
y volvieron,
y atraparon...
en el tiempo...
Resucitan cada poco,
quizá sean la parodia de la vida
o del tiempo...


¿Quién lo sabe?
Es posible que se escape
porque sabe que esas horas
pertenecen a otros días,
a otras almas,
a otras manos que rozaron tentaciones
cuando el tiempo sí abundaba.


Ese tiempo sin minutos,
que sí existe,
queda lejos,
sale a un viaje
sin retorno,
sin complejos,
sin espacios,
sin motivos, ni regresos.


Sí que hay tiempo,
pero, ahora sólo empleas ese espacio,
en otras cosas,
y aparece en ese mundo de la espera
descubriendo que te aguardan los horarios,
y no quieres o no puedes derrocharlos.


La conozco. La memoria.
Me dijiste que ella llega,
que hay lugares,
y en la brega,
una idea reaparece
en la ribera
de los tiempos del cariño;
unas veces son amigos,
otras veces es la entrega
de los años que esperaron
muchos plazos
pero, dicen que ella vuelve,
que regresa.


Si ella tarda,
se recrea otra memoria a las espaldas
que va llena de esperanzas;
que en el tiempo,
el que fuera,
aparece lo esperado
y doblega la ilusión
a realidades que superan
y sin tiempo;
es, entonces, que aparecen y se ahogan,
ya por fin,
las mil quimeras.


No es el tiempo amiga mía
es la distancia,
es la vida y, se burla con el tiempo
que la espanta
y hasta tú también rehúyes
ese lapso de caminos e ilusiones,
y de esperas,
sensaciones que se crean tan despacio...;
¡ni se sabe cuánto duran!


Volverán renovando nuestra vida,
floreciendo la aventura misteriosa
en nuestra mente,
sin más huella ni problema
que aceptar las realidades
de la vida
y el auténtico cariño.


Las versiones de los romances
se repiten en el tiempo
mil y un veces,
en espacios
de otras vidas,
ya sin tiempo de pararlos.


¿Es tu tiempo de romanza?...
¡Moriría con el tiempo
si se hiciera realidad
ese romance...!


Ángeles Sánchez Gandarillas ©
4-XI-2011

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