No
sé muy bien porqué, pero hace años que las Hijas de Cristo Rey me invitan el día su gran fiesta. Y asisto con mucho gusto porque “me caen
bien”. (Ya se sabe: hay personas,
congregaciones, asociaciones, etc. que igual que nos pueden “caer bien”, nos pueden “caer
mal”. A mí, las que me “caen mal”, que tampoco son muchas, me dan como una
especie de tristeza interior. Afortunadamente son infinitamente más las que me
“caen bien”, porque también es verdad que en el mundo hay mucha más gente buena
que mala). Pienso que a lo mejor, yo también les caigo bien a ellas, y es el
motivo por el que me invitan
Después
de la misa, nos ofrecen un “piscolabis” en los bajos del colegio, donde entre
alumnos, padres de alumnos, profesores, y simpatizantes como yo, nos
juntamos un montón. Lo de “piscolabis”
pasa de “pisco” y pasa de “labis”. Los padres de los alumnos son generosos.
Tanto, que nada más entrar se marea uno mirando tanta mesa con tantas bandejas
tan repletas. Predominan los colores
rojo inglés, y el crema tostada. Ya
sabes, el jamón, los embutidos…. Las empanadas, tortillas, y pinchos de miles formas…
Pero
este año descubrí un color nunca visto en un evento de este estilo: Había una
bandeja que destacaba sobre todas por su color especial y atrayente: estaba
repleta de “tartaletas color azul
turquesa”. Estaba intacta, y yo no me atrevía a ser el primero en meter la mano
en el plato. Mientras tanto, de aquello que antes llamé “piscolabis”, me fui
poniendo morado, porque no resistía la tentación de probar todo. No. De verdad que no, que a mi no me da
vergüenza picar de aquí y de allá, y echar para abajo lo que como con un vaso
de tinto. ¿Qué alguien suele decir “Mira
como jama ese” ¡Pues claro, a eso
fuimos! Y tú ¿no te das cuenta que
quien lo dice, siempre lo dice con la
boca llena? Es una forma de justificar lo que no necesita justificación.
No
pude aguantar más, y fui el primero en trincar una de aquellas “tartaletas
turquesa”. ¡Madre de Deu, como estaba aquella tartaleta! (Era dulce).
Yo que soy goloso, la saboreé despacio moviéndome entre la gente…
Después me dieron ganas de apagar la luz , para en lugar de una, coger dos,
(Coger dos de una vez, si me da vergüenza, porque estarás de acuerdo conmigo
que esto es cosa de glotones y señal de mala educación; y la mala educación es
para cuando nadie nos ve, por eso pensé en apagar la luz). Pero ¿sabes que
pasó…? Que tanto pensar si apago o si
dejo de apagar, cuando al fin decidí volver a coger solo otra, la bandeja estaba
vacía. Los hubo con menos problemas de conciencia.
Pero
la sorpresa del día no fue eso; la sorpresa me la llevé cuando un pajarito me
contó que la autora de las “tartaletas turquesa” es también la autora de
“Tiempos Pasados”, título con el que debuta en el blog del Taller de Escritura
de la Biblioteca Municipal de San Vicente de la Barquera, la futura gran
escritora, (si no, el tiempo lo dirá),
Alba Ortega García. Mira tú por
donde aún me queda, (o nos queda a los del Taller), la esperanza de volver a
catar algún día “tartaletas color turquesa…"
Jesús González ©
2 comentarios:
Hola Jesús, que buena crónica de ese día. Alba tiene muchos dones, ya has descubierto algunos, y también creo que esta chica vale para escribir y que mientras siga formándose con sus estudios, irá completando y mejorando esa opción. Yo así pensaba, lo que pasa que la quiero mucho, y además, soy su madrina en esto de las letras, no podía decírselo así de claro, porque pensaría que era por cariño que la tengo. Tu opinión me da la razón y así queda escrito. Abrazo y gracias por tu sinceridad. Lines
Bueno, bueno que bonito por Dios.
Mil gracias Jesús, por el deleite de tu escritura y por el cariño con que has impreso cada una de esas palabras dedicada a la ex alumna del Colegio Cristo Rey.
Yo por mi parte fui una de las afortunadas en saborear una de esas tartaletas azul cielo, pero al igual que Lines, como la quiero tanto, no esta libre de objetividad emocional mi opinión al respecto.
Unu besin para todos los miembros que colaboran en susurros
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