¡QUÉ BIEN TE VEO!

Hola corazón.

Al recibir tus letras siento que eres
la princesa de mares imparables,
que recogen emociones
y olas de cariño
arremansado en tus abrazos,
tan fuertes que me elevan de la tierra
y me posan en la ría, donde apenas ya navego
con mi cuerpo viejo y roto.

Recibo tu marea
que silencia mis lamentos,
y siento que me meces apretada en esos brazos,
entregándome de tus manos a las mías
todo el sol
y que reposas en la arena caldeada
el cariño que me tienes.

¡Qué bien te veo!, me dijiste,
y yo quise creerte vestida de amistad
y de contento.

Un abrazo de letras.


Ángeles Sánchez Gandarillas ©
10-IV-2013