miércoles, 6 de marzo de 2013

NOSOTRAS, LAS MUJERES

                                                       
                                                                                                                                        (radio)
Queridas tertulianas: 

                        Me dirijo a Ustedes para expresarles mi opinión sobre el semi debate que mantuvieron en Onda Continental, el pasado viernes, 1 de marzo.

                         Me encontraba yo zurciendo el mono de mi marido y, a la vez, pensando en la cena que iba a preparar cuando la presentadora del programa les preguntó que cómo se podía, hoy en día, llegar a fin de mes  Una de ellas habló de comprar productos de temporada  -como por ejemplo el berdel –o carballo- que además está a muy buen precio-   Dejé la costura y llegué a la nevera, por si mi marido habría comprado el pescado que comentaban.  ¡Qué suerte! Se había hecho con seis hermosas piezas.  También me percaté de que, había traído yogures sin nombres de marcas conocidas: eran los productos blancos a los que hacían referencia las tertulianas.  La verdad es que tengo suerte con este esposo mío.  Se parece, sin lugar a dudas, al esposo ahorrador de una de ellas;  la que afirmó que ella era una manirrota y que era su cónyuge, ahorrador por excelencia, el que llevaba las cuentas.  Las tres estaban de acuerdo en que  la  contabilidad la debía llevar el que fuera experto en números y que además fuera gran ahorrador.  Y llegó el problema con las “marcas” que eligen los hijos para el calzado y la ropa.  Dos de ellas –la manirrota otra vez se confesó culpable-  aseguraron de que han educado a los hijos,– a veces los han forzado, a equilibrar el precio y la calidad. Admitieron, que si al principio, se les hacía difícil, ya que otros se medio mofaban de ellos en la escuela, después, según iban madurando, agradecían a los progenitores el haberlos educado de forma lógica y equilibrada.

  Cuando se les preguntó cómo ayudarían a los de sin techo, hubo un momento de silencio  y, aquí, me desilusionaron; llegó la respuesta manida:  “Ah, eso es  quehacer  de los  políticos".  Dejaron claro que éstos tendrían que recortar los sueldos y, así ayudar a los necesitados,  ampliar el cupo en los comedores sociales..  Discreparon en que los políticos conocieran “in  situ” la insufrible situación de muchos hogares. Lo que afirmaron al unísono – en cuanto si había gobernantes  fiables-  dijeron que  “haberlas haylas.”

Cuando acabó la charla me quedé con la sensación de que, quizás, habría que eliminar a los grupos dirigentes y, dejar durante un tiempo razonable, que la ciudadanía fuera la que repartiera las ascuas bajo todos los pucheros.

                        San Vicente de la Barquera, a 4 de marzo de 2013
                                            Isabel Bascaran ©

1 comentario:

Anónimo dijo...

En fin, sensato, muy sensato y claro este escrito.
La vida vista desde el día a día y distintas profesiones. Oigo por ahí que tenemos audiencia en los viernes con el programa radiofónico "Entre nosotras", e incluso, llegamos a sorprender a ciertos oyentes porque demostramos "pensar". ¿A qué es interersante?