martes, 13 de marzo de 2012

SUSPIRABAN.


...Y ella suspiraba a la espera del silencio,
cantaba entre los labios las baladas,
decía que él se fue sin su respuesta,
hablaba del amor y de las rías.

Sonaban en los mares las mareas,
resacas de la historia que contaron,
se amaban pero él se despedía,
no hablaba, sus silencios la mentían.

Cantaba y susurraba sin descanso
en las cuerdas de guitarra entumecidas,
dejaba melodías incansables
de penas en los fados y en la orilla.

Sabía desde siempre el no retorno,
penaba al presentir tanta perfidia,
los leños de su casa se agotaban
y las aves se posaban en la arena.

Lloraba por saber del abandono,
saberes que implicaban más mentiras,
sonaban a disparos en la noche,
herían en lo claro de los días.

Del hueco que nacía con las hambres,
se oían a lo lejos las campanas,
pasiones fallecidas y distantes.
Las hojas de aquel libro de Darío,
poemas sin estantes ni lectores
de aquellos que partieron sin mirarse.

¿Qué añoras?, me pregunto en desespero,
¿qué luchas?, pues se fue lo que dijiste,
recuerda, fuiste tú el que partías,
no mientas, fuiste tú el diferente.

Aquello terminó, hoy vuelven fríos
los tiempos del presente.

Ángeles Sánchez Gandarillas ©
13-III-2012

No hay comentarios: