Flor, me parece estupendo dejar descansar a Foncho el mes de agosto, pero como ayer lo vi y le dije que tenía un escrito preparado para corregir y mandar aquí va, el último hasta septiembre.
Va a cuento del verso del otro día sobre el cuerpo humano, en plan un poco de “coña”, aunque sea cierto todo ello, no es menos cierto, y me niego en redondo, a creer que solo somos eso, un trozo de carne expulsando cositas, y como hoy me siento un poco filosóofica voy allá con perdón de todos los entendidos en la materia.
Nuestro yo, eso que somos y que nos hace únicos e intransferibles, que nos hace diferentes a todos, eso que se nos va cuando nos morimos ypara muchos es el alma o energía. Dicen que la energía no muere, que se transforma.
Tan iguales y tan diferentes. Tan iguales aunque seamos blancos o negros o amarillos o cobrizos. Unos altos o bajos, gordos o delgados. Tan diferentes en las diversas culturas de todos los continentes de esta llamada Tierra, cuando las tres cuartas partes son de agua.
Si nos subimos a un piso alto ya se nos ve chiquititos, si nos subimos a un avión empezamos a desaparecer, y no te digo nada las fotografías de los astronautas, desde donde ven nuestro Planeta azul por lo que dije antes. Y aquí estamos, como hormiguitas dentro del Cosmos.
Nuestra mente y nuestro cerebro. Cuántos interrogantes. Lo que a uno le fascina otro lo aborrece. Los deportes de riesgo, las artes, la música, la decoración, las religiones, la política. Todo es diferente y eso es los que hace al mundo tan interesante y que los filósofos escriban libros y más libros sobre la mente y el comportamiento humano. Hay una cosa afín a todos: “queremos querer y que nos quieran”.
Parece ser que hemos ido evolucionando a mejor, que somos mas civilizados, pero sigo viendo guerras espantosas, matrimonios destrozados, asesinatos por doquier, terrorismo brutal en el mundo entero, (aquí por desgracia lo conocemos bien), y sobre todo en estos momentos aciagos de nuevo golpeándonos con toda crudeza. ¡Hasta cuando! Y qué demonios puede pasar por esas mentes para provocar esos asesinatos tan atroces de atar apuñalar y quemar a otro ser humano.
La mente humana es y será siempre un misterio. El por qué de conductas tan aberrantes junto a otras de un altruismo con mayúsculas como una Teresa de Calcuta. Ella les dijo a los periodistas cuando la preguntaron que lo hacía por amor a Dios y que lo publicasen por el mundo entero. Hay muchas personas por el mundo haciendo el bien sin esperar nada a cambio, pero eso pasa desapercibido, y el mal sin embargo es tan aparatoso…
Somos seres sociales que nos gusta identificarnos con un grupo compartiendo e intercambiando. El hoy por mi, mañana por ti. Eso está fenomenal, ayudarnos entre familia y amigos, pero no deja de ser un amor de segundas o un altruismo generoso y un tanto provechoso. Somos mas altos, mas guapos, mejor alimentados, más higiénicos, pero seguimos sin saber a veces disfrutar de lo que tenemos .
Me gusta guardar papelorios que considero interesantes de personas, como se suele decir, con peso específico. ¿Qué os parece este? Lo tengo hace mucho y aunque es anónimo a mi me pareció precioso.
Va a cuento del verso del otro día sobre el cuerpo humano, en plan un poco de “coña”, aunque sea cierto todo ello, no es menos cierto, y me niego en redondo, a creer que solo somos eso, un trozo de carne expulsando cositas, y como hoy me siento un poco filosóofica voy allá con perdón de todos los entendidos en la materia.
Nuestro yo, eso que somos y que nos hace únicos e intransferibles, que nos hace diferentes a todos, eso que se nos va cuando nos morimos ypara muchos es el alma o energía. Dicen que la energía no muere, que se transforma.
Tan iguales y tan diferentes. Tan iguales aunque seamos blancos o negros o amarillos o cobrizos. Unos altos o bajos, gordos o delgados. Tan diferentes en las diversas culturas de todos los continentes de esta llamada Tierra, cuando las tres cuartas partes son de agua.
Si nos subimos a un piso alto ya se nos ve chiquititos, si nos subimos a un avión empezamos a desaparecer, y no te digo nada las fotografías de los astronautas, desde donde ven nuestro Planeta azul por lo que dije antes. Y aquí estamos, como hormiguitas dentro del Cosmos.
Nuestra mente y nuestro cerebro. Cuántos interrogantes. Lo que a uno le fascina otro lo aborrece. Los deportes de riesgo, las artes, la música, la decoración, las religiones, la política. Todo es diferente y eso es los que hace al mundo tan interesante y que los filósofos escriban libros y más libros sobre la mente y el comportamiento humano. Hay una cosa afín a todos: “queremos querer y que nos quieran”.
Parece ser que hemos ido evolucionando a mejor, que somos mas civilizados, pero sigo viendo guerras espantosas, matrimonios destrozados, asesinatos por doquier, terrorismo brutal en el mundo entero, (aquí por desgracia lo conocemos bien), y sobre todo en estos momentos aciagos de nuevo golpeándonos con toda crudeza. ¡Hasta cuando! Y qué demonios puede pasar por esas mentes para provocar esos asesinatos tan atroces de atar apuñalar y quemar a otro ser humano.
La mente humana es y será siempre un misterio. El por qué de conductas tan aberrantes junto a otras de un altruismo con mayúsculas como una Teresa de Calcuta. Ella les dijo a los periodistas cuando la preguntaron que lo hacía por amor a Dios y que lo publicasen por el mundo entero. Hay muchas personas por el mundo haciendo el bien sin esperar nada a cambio, pero eso pasa desapercibido, y el mal sin embargo es tan aparatoso…
Somos seres sociales que nos gusta identificarnos con un grupo compartiendo e intercambiando. El hoy por mi, mañana por ti. Eso está fenomenal, ayudarnos entre familia y amigos, pero no deja de ser un amor de segundas o un altruismo generoso y un tanto provechoso. Somos mas altos, mas guapos, mejor alimentados, más higiénicos, pero seguimos sin saber a veces disfrutar de lo que tenemos .
Me gusta guardar papelorios que considero interesantes de personas, como se suele decir, con peso específico. ¿Qué os parece este? Lo tengo hace mucho y aunque es anónimo a mi me pareció precioso.
DEL TIEMPO Y DE LA VIDA
DATE TIEMPO PARA TRABAJAR
Es el precio del éxito
DATE TIEMPO PARA PENSAR
Es el origen del poder
DATE TIEMPO PARA AMAR Y SER AMADO
Es el privilegio de los dioses
DATE TIEMPO PARA JUGAR
Es el secreto de la eterna juventud
DATE TIEMPO PARA LEER
Es el fundamento de la sabiduría
DATE TIEMPO PARA SOÑAR
Es como enganchar tu carro a una estrella.
DATE TIEMPO PARA TENER AMIGOS
Es el camino de la felicidad.
DATE TIEMPO PARA MIRAR A TU ALREDEDOR
El día es muy corto para ser egoistas.
DATE TIEMPO PARA REIR
Es la música del alma.
¿No es mas bonito hacer algo como esto, que dejarse llevar por la bebida, tabaco, drogas, juego o sexo exacerbado, arruinando unas vidas que quedan esclavizadas por esos vicios que tanto les cuesta dejar a una minoría?
Mª Eulalia Delgado González ©
Julio 2009
1 comentario:
Hola Lali,llevas mucha razón pero reconoce que tambien nosotros nos hemos enganchado a este proyecto tan sano,que es escribir,me sigues asombrando con tus palabras,besitos.
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