A Tudanca hemos venido,
María nos convenció,
A visitar la Casona
Donde un poeta murió.
Después de un rato agradable,
Entre libros y poesía,
Nos juntamos a comer
en agradable armonía.
Muy bien hemos almorzado
Un cocido montañés,
Una carne tiernecita,
Y el postre con el café.
Ahora ya, en la sobremesa,
Entre charlas y sonrisas,
Un sopor que viene y entra,
Detrás de la comidita.
Regresamos muy contentos
Tras disfrutar de un buen día,
Con conductor de primera
De mucha categoría.
Al profe en su cumpleaños,
Por maternidad María,
Y a Nieves en gratitud
Por su buena artesanía.
Las letras nos han unido
A los del club y el taller,
Teniendo muy claro todos
¡A quién se ha de agradecer!
Flor Martínez Salces ©
13 Noviembre 2010
María nos convenció,
A visitar la Casona
Donde un poeta murió.
Después de un rato agradable,
Entre libros y poesía,
Nos juntamos a comer
en agradable armonía.
Muy bien hemos almorzado
Un cocido montañés,
Una carne tiernecita,
Y el postre con el café.
Ahora ya, en la sobremesa,
Entre charlas y sonrisas,
Un sopor que viene y entra,
Detrás de la comidita.
Regresamos muy contentos
Tras disfrutar de un buen día,
Con conductor de primera
De mucha categoría.
Al profe en su cumpleaños,
Por maternidad María,
Y a Nieves en gratitud
Por su buena artesanía.
Las letras nos han unido
A los del club y el taller,
Teniendo muy claro todos
¡A quién se ha de agradecer!
Flor Martínez Salces ©
13 Noviembre 2010
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